Empresa familiar: ocho claves para atraer a grandes patrimonios

Tras la crisis financiera mundial, el acceso a capital a menudo constituye un reto para las empresas, que requieren de financiación para acelerar su crecimiento. Para  las empresas familiares, los inversores particulares con elevados patrimonios se posicionan cada vez mejor como fuente de financiación.

Los grandes patrimonios “valoran la tradición y la confianza que inspira la empresa familiar”, según asegura Juan José Cano, socio responsable de Empresa Familiar de KPMG en España, y suponen una alternativa que encaja bien con la vocación de las empresas familiares de mantener el control del negocio como clave de éxito.

A este respecto, el informe elaborado por KPMG Global sobre las posibles fuentes de financiación para la empresa familiar, proporciona las claves para buscar eficazmente, consolidar y mantener una relación productiva entre los grandes patrimonios y las empresas familiares:

1.       Tener un diálogo abierto con los grandes patrimonios. Muchas empresas familiares considerarían ofrecer una participación a los inversores de grandes patrimonios, manteniendo el control. Los grandes patrimonios a menudo buscan obtener una participación que les otorgue el control. Sin embargo, existen mecanismos que pueden ser diseñados por ambas partes como la capacidad de intervenir y contribuir manteniendo la independencia en las decisiones estratégicas.

2.       Dedicar tiempo a construir y ampliar tu red de contactos. Encontrar el socio comercial idóneo puede convertirse en una difícil tarea si no se cuenta con una buena red de contactos. Con mejores redes y conexiones, las empresas familiares aumentarán sus posibilidades de encontrar a la pareja adecuada para su negocio.

3.       Reconocer los horizontes a largo plazo comunes a la mayoría de los grandes patrimonios.  La sostenibilidad de la empresa en el largo plazo es fundamental para atraer a grandes patrimonios, que aprecian la inversión personal y la participación que los miembros de la familia tienen en el negocio. Su importancia para la familia les ofrece seguridad y les anima a invertir.

4.       Destacar los beneficios tangibles de invertir en su negocio. A la hora de invertir, los grandes patrimonios priorizan los factores tangibles, es por ello que las empresas deben mostrarse atractivas en términos de rentabilidad, crecimiento orgánico y gestión en el largo plazo.

5.       Demostrar que la empresa da la bienvenida a consejos externos. Muchas empresas familiares reconocen la importancia de la influencia externa y el valor de los consejeros independientes. Además, más allá de proporcionar financiación, los grandes patrimonios también pueden aportar ideas que beneficien a la empresa.

6.       Asegurarse que existen estructuras de buen gobierno en marcha. El motivo principal que podría disuadir a los grandes patrimonios de invertir en empresas familiares es la posibilidad de un conflicto entre los miembros de la familia. Para disipar estas preocupaciones es necesario contar con estructuras de gobierno correctas, como un comité profesional e independiente de los ejecutivos y líneas claras de control.

7.       Considerar  la posibilidad de ofrecer un puesto en el comité. La idea de tener una participación en el comité de las empresas familiares resulta muy atractiva para los grandes patrimonios. Los negocios familiares deben considerar esta opción, pues ellos mismos podrán definir el alcance de su participación, sin arriesgarse a perder el carácter independiente de su empresa.

8.       Mantenerlo a nivel personal. Los grandes patrimonios valoran el toque personal de sus inversiones en empresas familiares. Así, los gestores del negocio deben mantener y promover el buen contacto regular con sus socios.